Tenemos que hablar de Kevin / Análisis breve
FAMILIA (Del latín Famulus, que significa sirviente o esclavo)
MAMÁ: tiene alrededor de 40 años. Una mujer inteligente, independiente económicamente. Es una reconocida autora de guías de viaje. Ama los mapas y viajar. Antes de tener a sus hijos, era una mujer que disfrutaba de su libertad.
PAPÁ: tiene alrededor de 40 años. Un hombre noble, bonachón. Opuesto a su esposa, prefiere la estabilidad a la libertad. Padre promedio que ve a sus hijos en los lapsos que no está trabajando, juega con ellos y cree que con eso cumple su rol.
HIJO: adolescente la mayor parte de la película. Arrogante, manipulador, violento. Cede ante su padre, pero se enemista con su madre y hermana. Problemático en todas sus etapas.
HIJA: tiene alrededor de cinco años. Contrario a su hermano, no da problema alguno. Inocente, víctima de su hermano que se sintió desplazado desde su nacimiento.
NO TE RESISTAS
En la película nos presentan cuatro etapas de la vida de Kevin. En cada una de estas hay una problemática evidente que con el tiempo va adquiriendo mayores dimensiones. Empieza con el llanto continuo, después la negación a acatar ordenes, el no controlar esfínteres a voluntad, la manipulación, la mentira, entre otras. Todas estas conductas siempre van dirigidas a su madre, principalmente.
Todas las conductas que vi en Kevin, inmediatamente las relacioné con el TPA (Trastorno de la personalidad antisocial), en el cual según el Manual MSD:
Los pacientes con trastorno antisocial de la personalidad pueden racionalizar sus acciones culpando a los que les hacen daño (p. ej., se lo merecían) o a la forma de vida. Están decididos a no ser avasallados y hacen lo que consideran que es mejor para ellos a cualquier precio. Estos pacientes carecen de empatía por los demás y pueden ser despectivos o indiferentes a los sentimientos, derechos, y sufrimiento de las otras personas. Tienden a tener una alta opinión de sí mismos y pueden ser muy obstinados, seguros de sí mismos, o arrogantes. Pueden ser encantadores, volubles y hábiles verbalmente en sus esfuerzos para conseguir lo que quieren.
Este trastorno es más frecuente en los hombres que en las mujeres y la prevalencia disminuye con la edad. En este último punto recurro al final de la película donde Eva visita a su hijo a la cárcel, dos años después del suceso cumbre de la violencia que Kevin ya venía mostrando. Eva le pregunta por qué hizo aquello (los asesinatos), a lo que Kevin responde que antes lo sabía, pero que ahora no. Quizá esto nos demuestre que, con el crecimiento, Kevin ya no le vea sentido a aquellos actos cometidos cuando tenía 16 años.
QUE TE ACOSTUMBRES A ALGO, NO SIGNIFICA QUE TE GUSTE
A lo largo de la trama de la película en analogía con la vida de Kevin, son evidentes varias de sus conductas anormales, las cuales dan a entender que hay una situación que atender. Eva lleva al pediatra a Kevin de pequeño, preocupada por su comportamiento, siendo esta la única vez que lo hace. En ese momento los signos se adjudican a un desarrollo tardío, nada serio.
Con el paso del tiempo los síntomas con cada vez más severos y preocupantes, pero la única que nota esto es Eva, ya que su esposo, Franklin, ignora la situación, o intuyo, la niega, como mecanismo de defensa, para no aceptar la responsabilidad que esto conlleva.
Kevin, entonces, desarrolla una conducta agresiva de manera cautelosa, siendo su madre la víctima principal. Y lo que en un principio parecen ser berrinches, empiezan a evolucionar a actos de violencia psicológica y física a tal grado de llegar a cometer homicidio, de sus compañeros y de su propio padre y hermana.
NO TE VES FELIZ
¿ALGUNA VEZ LO HE SIDO?
Considero que la conducta de Kevin se debe tanto al trastorno de la personalidad que antes mencioné, como a la relación simbiótica que mantuvo con su madre. Es evidente en la película, como en la vida misma, que un hijo viene a interrumpir la libertad de la mujer en la que habita. Eva (desconozco si el nombre sea un símbolo intencionado), vive antes de Kevin en un paraíso (metafóricamente hablando). Viaja y ama, sin ninguna restricción y atadura. En la película, muestran un reloj despertador a las 12:01 y acto después aparece la escena en la que Eva se entera de su embarazo, aludiendo a que un bebé es un comienzo como si fuese un nuevo día.
Es evidente que Eva no está contenta con su embarazo, por lo que implicará para su individualidad. Incluso al momento de dar a luz una de las parteras le dice a la nueva madre “no te resistas”, aludiendo al alumbramiento, pero significando la oposición a la maternidad. Este rechazo se materializa cuando Eva se enfrenta a su hijo físico y hay un rechazo silencioso, pero presente y notorio, ya que incluso el mismo Kevin en una ocasión le dice a su madre “que te acostumbres a algo, no significa que te guste, lo hiciste conmigo”, refiriéndose a la no aceptación de ser madre.
En una ocasión, Eva enuncia un literal “mami era tan feliz antes que Kevin llegara”, que no es sino la causa del dolor y lucha de ambos. Eva se resiste a Kevin, aunque acepta la responsabilidad de ser madre y Kevin hace todo por molestarla, como una manera constante de llamar su atención, remitiéndonos al complejo de Edipo que se da principalmente en la infancia, pero que puede volver a surgir en la adolescencia.
Diremos, pues, que, en la relación de Eva y Kevin, ambos sufren. Kevin, por la no aceptación de su madre. Eva, por la renuncia implícita a su individualidad. Y es en este sufrir, que ambos se consagran como uno, expresando su amor, por medio del dolor.
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